Recorrer este colorido poblado es darse la oportunidad para indagar sobre el pasado. En una primera impresión, la antigua arquitectura de adobe de dos plantas que existía en el lugar y sus calles anchas nos invitan a preguntarnos sobre los mejores periodos que se vivieron en el lugar.
Su templo de construcción modesta al estilo de las misiones jesuitas en el norte de México, está semioculto por un domo de reciente construcción, que por su fachada principal no pierde su vista, siendo uno de los más antiguos en el municipio de Santiago Papasquiaro. En su torre de piedra blanca se puede notar el paso de los siglos, pero la resistencia de su templo y la vida cotidiana a su alrededor revelan el empuje de su gente.
El pueblo de San Miguel de Papasquiaro se encuentra cercano a otros poblados como Canatán y El Arco. Allí termina el pavimento que conduce a las comunidades de la región Río Arriba, pero al seguir por las terracerías se puede llegar a Los Pachones, La Galera o Tenerapa.
Su cercanía con el Río Santiago, lo hace un espacio agradable para senderismo y días de campo sobre todo en los meses del verano en que reverdece. Si viajas al lugar toma precauciones respecto al clima, las crecientes en el río, vida silvestre y tiempos de traslado. En el lugar se encuentra una pequeña clínica del IMSS que presta atención a la población sin seguridad social.
Si visitas este u otros sitios naturales lleva tu basura contigo.
Sigue leyendo sobre en San Miguel de Papasquiaro. El adobe sobrepasando al tiempo y Descubrimos las comunidades a través de la fotografía
Fotografía y texto: Cristian Herrera
tierramixta.com.mx 